NUESTRA MADRE Y SEÑORA VIRGEN DEL MAR ALMERIA
MENSAJE ESPIRITUAL DE LA MADRE MARÍA
CONFIANZA EN EL FUTURO
Es un gran placer ir a verlos.
Yo Soy quien fue María en la Tierra.
Sin embargo, ¡soy tan diferente ahora!
Vendré cada vez más a ustedes, a todos mis hijos, porque todavía puedo considerarlos como mis hijos.
¡En mi corazón, hay lugar para todos los hijos de la Tierra!
En el Amor, hay lugar para todos los hijos de la Tierra.
Me manifestaré cada vez más en todas partes, visible o invisible, como hoy.
Me gustaría que sintieras mi Vibración, mi Amor, mi Presencia, es la prueba de que estás en armonía con lo que soy, con lo que represento.
Sin embargo, si aún no me sientes, está bien, porque me presentaré a ti de una manera diferente, y te amaré mucho.
¡Sé feliz, los tiempos están aquí, la renovación está ahí, los tiempos en los que se volverán a encontrar, los tiempos en los que nos encontrarán!
He vivido en la Tierra, conozco a los hombres, a mis hermanos, a mis hijos.
Conozco a las dificultades tridimensionales, la única diferencia, es que yo estaba al tanto de otras cosas, de las que es posible, que ustedes, todavía no se den cuenta.
En la Tierra, sufrí en relación con mi hijo, y también, en relación con algunas de mis ideas, que estaban demasiado por delante del mundo, en ese momento.
Tuve que dejar el lugar donde vivía, y que amaba profundamente.
Tuve que dejar a personas, que eran muy, muy queridas para mí, pero lo hice por Amor, porque sabía que tenía que hacerlo.
Sabía que tenía que dejar mi huella en otras partes del mundo, y me fui a esas otras partes del mundo.
Allí, en todas esas partes, he dejado mi gran Luz.
Me llevaron los hermanos con los que estoy ahora, a Egipto, a la India, a Francia, y también a Italia, porque este país, también me necesitaba.
Me llevaron a hacer un trabajo muy sencillo, no solo un trabajo de apertura, sino también a enseñar a ciertos grupos de seres muy evolucionados, para que ellos mismos, luego, pudieran continuar el trabajo que yo había comenzado, cuando estaba en Palestina.
Yo sigo existiendo, pero no de la misma manera.
Me proyecto en varios lugares del planeta Tierra.
Repito una vez más: puedo manifestarme físicamente.
Y también les digo esto:
Llegará un momento, en que no solo percibirás mi frecuencia vibratoria, sino que percibirás mi Luz.
Con los ojos cerrados, percibirás una Luz que emanará de lo que soy.
Sucederá, te lo puedo asegurar, porque me aseguraré de que me sientas físicamente, y que tú también me percibas, en mi Luz y mi Amor.
Me gustaría agregar esto:
¡Ten confianza!
¡Confía en tu futuro!
Vendré una y otra vez, a este lugar.
También vendré en tus sueños, incluso, si no pones mi nombre en quién soy.
Podrás tener sueños maravillosos, durante los cuales, vendré a poner Amor en tu corazón, y también a despertar tu conciencia.
Puedo considerarme la Madre de todos los hombres, porque amo a todos los hombres.
Todos ustedes son mis hijos, de la misma manera y cada vez más profundamente, con cada vez más poder.
No me importa, en absoluto, si son cristianos, budistas o musulmanes, o si no tienen religión.
Tampoco me importa si no creen en mí.
Mi amor no hace distingos: ¡los amo incondicionalmente a todos!
Un ser humano, es un ser que puede amar, un ser humano, es un ser que puede despertar, y que también, puede ofrecer mucho a sus hermanos.
Así que trato de hacer todo lo posible, para darte todo lo que puedo darte, para que tú, a la vez, puedas ofrecérselo a tus hermanos.
Si le das mucho Amor a uno de tus hermanos, y si siente el Amor que le ofreces, a su vez, podrá ofrecérselo a otro de sus hermanos, etc.
Y de esta forma, empezarás a crear, una cadena de Amor.
Esto es lo que quiero, esto es lo que puedes hacer, ¡y esto, es lo que te ayudaré a hacer!
Soy tu Madre María
MONIQUE MATHIEU
